El COVID-19 provocó un cambio sísmico en la transformación digital de las escuelas.
En el movimiento en línea más grande en la educación -jamás visto- las aulas remotas y combinadas se convirtieron en la nueva norma. El cambio, especialmente cuando nos es impuesto, trae desafíos para los involucrados; en este caso no solo para los estudiantes, sino también para los profesores y el personal de soporte de TI en las escuelas.
Entonces, ¿cuáles son los desafíos que surgieron del masivo cambio hacia las aulas a distancia y combinadas, y qué mejoras necesitaron las escuelas para apoyar a los profesores y al personal de TI?
Los desafíos de proporcionar aprendizaje remoto y combinado de calidad
Informes recientes, incluido un estudio del Centro de Investigación de Education Week, una organización con sede en EE. UU. que realiza investigaciones en el sector educativo, y una encuesta de Absolute, una compañía de soluciones de seguridad, proporcionan algunos conocimientos valiosos:
- Hay muchos más dispositivos en uso.
El cambio hacia modelos de aprendizaje a distancia y híbridos significó que la demanda de dispositivos se disparó ya que profesores y estudiantes de repente tuvieron una dependencia mucho mayor de móviles y herramientas digitales. - Gestionar y mantener el equipo fue más difícil.
No solo había más dispositivos, sino que estos dispositivos también estaban en movimiento. Con el aprendizaje híbrido, podrían estar ubicados en el aula o en los laboratorios de computación, o en las casas de los estudiantes. Esto hizo que la gestión del inventario de TI, el mantenimiento del equipo y la resolución de problemas fueran tareas más difíciles. - La demanda de asistencia de TI se disparó.
Los equipos de TI pasaron de apoyar al personal docente a ayudar prácticamente a cada estudiante y padre con un problema de aprendizaje remoto. - Los resultados del aprendizaje pueden haberse visto comprometidos debido a las limitaciones de los dispositivos.
- Los profesores estaban haciendo labores de TI en lugar de enseñar.
Casi el 90% de los profesores informaron que dedicaban más tiempo a solucionar problemas de TI, consumiendo valioso tiempo educativo y causando frustración en los docentes.
En resumen, las escuelas, grandes y pequeñas, se encontraron navegando en aguas desconocidas. Para apoyar a los profesores y el éxito de los estudiantes, se volvió más crítico que nunca que las escuelas estuvieran equipadas con las herramientas tecnológicas adecuadas.
¿Qué herramientas tecnológicas necesitan las escuelas para enfrentar estos desafíos?
Según los hallazgos de una encuesta de CDW Corporation, un proveedor de productos tecnológicos, los líderes de TI en el sector educativo han identificado las tres principales herramientas tecnológicas clave para involucrar a los estudiantes en el aprendizaje en línea mientras simplifican simultáneamente el flujo de trabajo para los profesores. Estas son:
Herramientas y aplicaciones colaborativas (53%)
Las herramientas colaborativas permiten a las personas trabajar juntas como un grupo y compartir ideas y contenido de manera instantánea. Un aspecto importante de la enseñanza presencial es el trabajo en grupo y el brainstorming. Las herramientas colaborativas significan que las valiosas habilidades blandas que se derivan de estas actividades, como el trabajo en equipo, aún pueden lograrse con el aprendizaje en línea.
Herramientas de almacenamiento (41%)
Estas pueden variar desde memorias USB y discos de estado sólido hasta almacenamiento en la nube.
Herramientas de compartición de archivos (39%).
Las herramientas de compartición de archivos permiten que varias personas usen el mismo archivo o archivos con varios niveles de acceso, permitiendo a las personas seleccionadas leerlo, modificarlo, copiarlo o imprimirlo.
Además, con el equipo distribuido entre escuelas y hogares, un sistema centralizado de gestión de dispositivos es otro aspecto esencial a considerar para el aprendizaje híbrido. En resumen, al adquirir nueva tecnología, las escuelas necesitan considerar precisamente cómo el dispositivo permitirá la interacción en clase, colaboración, compartición de archivos y gestión de TI.
Proyector Inteligente BenQ: un dispositivo que cumple con todos los desafíos.
Si bien los desafíos son muchos, con el proyector inteligente BenQ, la solución es simple. Este innovador proyector para aulas es:
Diseñado para la colaboración.
Equipado con una Solución de Gestión de Dispositivos (DMS).
Esto permite al personal de TI acceder fácilmente de forma remota y controlar los ajustes del proyector inteligente o de un grupo de proyectores. Y las actualizaciones de firmware por aire (OTA) facilitan el mantenimiento, ayudando a reducir la carga de trabajo del personal de soporte de TI.
Adecuado para compartir archivos tanto offline como online.
El compartir offline es fácil. El proyector inteligente tiene capacidades de lectura USB que permiten la proyección directa de todos los formatos de archivo, sin necesidad de un portátil. En cuanto al compartir en línea, el proyector inteligente está equipado con un Sistema de Gestión de Cuentas (AMS) que permite un fácil acceso y gestión de archivos de enseñanza directamente en la nube.
La pandemia de COVID-19 tuvo un impacto significativo en la educación y en el uso de la tecnología para el aprendizaje. El cambio entre el aprendizaje presencial, a distancia y en línea se gestionó, y se ha demostrado que las escuelas tienen la capacidad de hacerlo si es necesario. Las herramientas adecuadas para realizar esta tarea nunca han sido tan esenciales, pero más allá de la pandemia, la oportunidad sigue existiendo para utilizar la tecnología aún más.
Esta es una herramienta que facilita la participación de los estudiantes y permite a los profesores lograr más con menos esfuerzo. El proyector para aulas de BenQ: enfrentando de frente los desafíos planteados por la transformación digital.
