Monitores
Proyectores
Lámparas
Pantalla táctil interactiva | Signage
“A ver… este proyector dice que tiene un brillo de 1000 lúmenes y ese otro que 2400, ¿y tienen el mismo precio? ¡No tiene pinta de estar bien! ¿Me estoy perdiendo algo?”.
Un objetivo habitual entre los consumidores que buscan su primer proyector es comprar el más brillante que puedan, pero cuando analizan realmente el problema, muchos de ellos acaban enfrentándose a un problema mayor: ¿cómo entender las diversas especificaciones de brillo que se encuentran? Esto se debe a que algunas marcas anuncian especificaciones de brillo de forma diferente que la mayoría. De las diversas especificaciones de brillo que puede encontrar un consumidor, las más comunes son brillo ANSI, brillo de LED y brillo de la fuente de luz.
Si bien los tres tipos de brillo utilizan la misma unidad estándar, el lumen, las diferencias en sus definiciones provocan una enorme fluctuación de sus valores, lo que da como resultado casos en los que un proyector que declara lúmenes ANSI pueda tener un valor de 1000 lúmenes, mientras que otro de la competencia, que anuncie lúmenes LED, afirme dar 2400 lúmenes. Así las cosas, la pregunta que se plantea es que si todos estos tipos de brillo se miden en lúmenes, ¿por qué sus valores son tan drásticamente diferentes?
Basta decir que la razón de esta inconsistencia es que cada uno de los tres tipos mencionados anteriormente mide diferentes aspectos del brillo de un proyector. No obstante, antes de profundizar en las diferencias entre cada tipo (las abordaremos más adelante), lo que la mayoría de los consumidores de verdad necesitan es una forma rápida de convertir los valores de un tipo de brillo a otro, para lo cual proporcionamos la siguiente tabla:
Analizando esta tabla es fácil distinguir una única constante en ella: el brillo ANSI. Esto se debe a cómo se definen las medidas de brillo.
El brillo ANSI es el definido por el American National Standards Institute, que implica tomar varias lecturas de brillo en diferentes puntos de una pantalla blanca proyectada y promediarlas en su conjunto.
El brillo de LED es un parámetro utilizado por algunos fabricantes que intenta cuantificar el brillo adicional que percibe el ojo humano como resultado de colores muy saturados, lo que también se conoce como efecto Helmholtz-Kohlrausch (HK).
El brillo de fuente de luz se mide directamente en la fuente de luz del proyector, antes de cualquiera de los efectos de los componentes de imagen del proyector.
Al conocer esta definición, queda más patente por qué el estándar para medir el brillo es el ANSI (como se deduce de la tabla anterior). El motivo es que el brillo ANSI, como su propio nombre indica, es la única medida de brillo que utiliza una metodología científica estándar certificada por un organismo internacional. Esto otorga a las mediciones de brillo ANSI una fiabilidad de la que carecen otros sistemas de medición del brillo que pueden depender de factores arbitrarios (por ejemplo, cómo se mide el efecto HK en el brillo de LED) o indicar un valor de brillo indirecto (por ejemplo, cómo el brillo de fuente de luz omite los efectos negativos que tienen los componentes internos del proyector sobre su brillo final) para anunciar cifras engañosas o infladas.
El American National Standards Institute (ANSI) es una institución privada sin ánimo de lucro que gestiona y coordina los estándares voluntarios y el sistema de evaluación de la conformidad en los Estados Unidos. Fundado en 1918, este instituto trabaja en estrecha colaboración con la industria y el gobierno para identificar y desarrollar soluciones de estándares y conformidad acordes con las prioridades nacionales y mundiales.