Monitores
Proyectores
Lámparas
Pantalla táctil interactiva | Signage
Sin duda, porque este estándar brinda una indicación clara del rendimiento de HDR. Muchos monitores y televisores presumen de HDR (alto rango dinámico) pero solo se refieren a que reciben y procesan datos HDR, aunque puede que carezcan de la capacidad técnica para mostrarlos correctamente.
VESA (Video Electronics Standards Association) lanzó DisplayHDR en 2017 como una forma de medir el rendimiento de HDR y proporcionar a los clientes mayor información sobre este estándar. Esta iniciativa cuenta con el apoyo de muchos de los principales fabricantes de pantallas del mundo, incluido, por supuesto, BenQ (modestia aparte).
Antes de continuar, quien necesite refrescar conocimientos sobre la diferencia entre HDR y SDR o el alto rango dinámico en comparación con el normal, puede consultar el siguiente artículo.
Puede existir cierta confusión con respecto a DisplayHDR en cuanto a que no es un estándar HDR en sí mismo. DisplayHDR sirve como punto de referencia para medir el brillo máximo en pantallas LCD/LED y también los auténticos niveles de negro para las pantallas OLED. Los estándares HDR incluyen HDR10/HDR10+, HLG y Dolby Vision, cada uno de los cuales adopta un enfoque ligeramente diferente para ofrecer el alto rango dinámico en monitores y televisores.
DisplayHDR de VESA surgió para afrontar el hecho de que bastantes productos en el mercado hacían afirmaciones sobre HDR con poca base. Por ello, al ver el certificado DisplayHDR en un monitor de una marca de buena reputación, el consumidor sabe que el monitor ha sido probado y ha demostrado su capacidad HDR. Así pues, recapitulando, DisplayHDR no es un formato HDR, sino una herramienta para comprobar los formatos HDR y su rendimiento en determinado monitor.
Cabe resaltar que hemos usado el término “monitor”. Esto se debe a que DisplayHDR, en este momento, solo se aplica al mercado de PC, es decir, a los monitores, no a los televisores. Es posible que llegue a funcionar con los televisores, dado que su tecnología es esencialmente la misma, pero, actualmente, su uso en estos dispositivos no puede considerarse oficial. En el momento de escribir este texto, DisplayHDR solo se aplica a los monitores de PC.
Cualquiera se da cuenta enseguida de que los iconos y textos de las páginas dedicados a los monitores citan DisplayHDR seguido de 400, 500, 600, etc. Ese valor se refiere al brillo máximo medido en candelas por metro cuadrado o cd/m2, lo que equivale a un lux, es decir, la cantidad de luz que proporciona normalmente una vela en un metro cuadrado de espacio. Un nit es lo mismo, por lo que un monitor con 400 cd/m2 tiene también 400 nits de brillo máximo. Para que un monitor cumpla con DisplayHDR, ha de demostrar un brillo máximo de 400 cd/m2. Decimos “máximo” porque existe cierto margen de tolerancia a las fluctuaciones, aunque el brillo máximo ha de ser sostenible durante largos períodos de uso si los clientes ponen los ajustes al máximo.
Actualmente, VESA contempla hasta DisplayHDR 1400, es decir, 1400 cd/m2 de brillo máximo o luminancia. Se seleccionó el nivel 400 porque es donde HDR pasa a ser notable y útil. Cualquier valor por debajo de 300 cd/m2 no puede ofrecer un auténtico HDR, aunque afirme que lo hace. Muchos de los monitores más antiguos o baratos cuentan con HDR entre sus especificaciones, pero el brillo máximo real se encuentra en el rango de 200 a 300 cd/m2, lo que está hasta un 50 % por debajo de los requisitos para un auténtico HDR. Puede que tales monitores se vean algo mejor que los modelos sin HDR, pero realmente no aportarán todos los beneficios del alto rango dinámico.
Además de la luminancia máxima, los monitores que cumplen con DisplayHDR 400 y superiores deben admitir toda la gama de colores sRGB y tener una profundidad de color de al menos 8 bits. También se verifica una buena atenuación global que garantice un contraste dinámico efectivo. La atenuación global significa que toda la pantalla cambie de clara a oscura de manera uniforme y sin puntos localmente más brillantes. Por supuesto, los monitores más avanzados tienen zonas de atenuación locales que cambian partes de la pantalla individualmente para obtener una calidad de imagen aún más impresionante. No obstante, en lo que respecta a DisplayHDR, es el buen rendimiento de la atenuación global lo que sirve como punto de referencia.
Entre DisplayHDR 500 y 1400, los monitores deben mostrar una amplia gama de colores o admitir WCG. Los estándares más populares de WCG incluyen Adobe RGB, DCI-P3 y P3. La certificación VESA exige que los monitores de mayor brillo máximo también ofrezcan espacios de color más amplios para garantizar que luminancia (luz) y crominancia (color) aumenten conjuntamente. Asimismo, los niveles 500 a 1400 requieren atenuación local, mientras que DisplayHDR 400 acepta la atenuación global.
Técnicamente, un monitor de 1400 cd/m2 puede tener sRGB normal con atenuación global, pero VESA/DisplayHDR considera que es inaceptable, ya que esas especificaciones desequilibran la ecuación de luz/color y no pueden responder con suficiente precisión a los cambios de contraste, por lo que no se otorgaría la certificación DisplayHDR a esa pantalla.
No existe una respuesta categórica para eso, ya que cada usuario tiene sus preferencias en cuanto a brillo y contraste. Dicho esto, con un monitor con DisplayHDR 400 se puede afirmar que los contenidos HDR se presentarán como estaba previsto, sin lugar a dudas ni cesiones. Los niveles más altos de luminancia o brillo máximo implican un efecto HDR más potente y que el usuario lo aprecie o no depende totalmente de él. Hay quienes consideran que las pantallas excesivamente brillantes terminan ocasionando fatiga ocular, mientras que otras personan pueden disfrutarlas durante horas y horas. Es una elección muy personal.
Lo que no es subjetivo es que, sin una medición y prueba adecuadas por parte de fabricantes aprobados por VESA y sin al menos DisplayHDR 400, nunca sabremos realmente lo que vamos a obtener. Si un monitor no puede ofrecer color RGB de 8 bits con 400 cd/m2 de luminancia, entonces no llegará siquiera a un HDR básico.
Sí. Ya estamos completamente dentro de la era del 4K y el HDR, por lo que simplemente se trata de ajustarse a una norma adecuada y existe una herramienta de medición para ello. Antes de DisplayHDR, los fabricantes menos responsables podían salirse con la suya afirmando lo que quisieran y los consumidores tendían a aceptar su palabra sin más. DisplayHDR pone la ciencia del lado del comprador y garantiza que el HDR luzca de verdad y no solo en la hoja de especificaciones.
Dado que casi todos los buenos fabricantes de monitores se han unido a la iniciativa DisplayHDR de VESA, no hay razón para no insistir en esta certificación, con la que el cliente sabe que está obteniendo un rendimiento HDR real y demostrado. Se acabó sentarse ante un monitor nuevo con cara de emoji dubitativo, pensando “¿esto es realmente HDR o no?”. Aunque solo sea por quedarse tranquilo, merece la pena.
Por otra parte, también hay que tener en cuenta la creciente compatibilidad de las aplicaciones con HDR. Sistemas operativos de equipos de sobremesa, controladores de tarjetas gráficas, juegos y vídeo en streaming (obviamente), las consolas actuales y, sin duda, las futuras... y la lista continúa. HDR no es una moda pasajera, es el nuevo estándar básico: consigue un contraste más fuerte, una definición genuinamente brillante y oscura, colores más detallados y vivaces y una imagen impactante en general. En el futuro, HDR no va a hacer más que mejorar, así que debemos asegurarnos de estar pagando por un HDR de verdad, así de simple.